lunes, octubre 18, 2010

SILENCIO!!


Toca esperar... mas pruebas, mas resultados... siempre son los mismos. Mas vueltas y vuelve a esperar. 
Aquella vez le dijeron que debía resignarse. Su vida seria la de una mujer mas madura de lo que le correspondería: Cargada de achaques, con fatiga, con un arsenal de pastillas de esas que no pasarían un control de dopaje, con la memoria y las reacciones propias de una tortuga mosquitera..., pero eso si, trabajando. La perspectiva de operar había sido peor. Le habían dicho que si entraba en quirófano no quedaría igual, no había garantías y claro... - Virgencita, Virgencita que me quede como estoy aunque me quede tonta.-


Sara tenia gripe, pero estaba tan contenta con su moto nueva que pensó que bien abrigada podría con todo. (que Ilusa) Mientras conversaba con los compañeros la llamaron al movil y la expresión de su cara cambio. Siempre risueña con o sin fiebre, con o sin dolor, aquella llamada frunció su ceño visiblemente, sin tiempo para disimular, y se dejo caer en la silla de su mesa.
Nuevos acontecimientos... Los médicos, después de hablar entre ellos, habían decidido operar y querían hablar con ella. Atrás quedaba el consejo de la doctora, que se repetía incansable en su cabeza: riesgos, igual quedas peor de los que estas, para qué, si no hay garantías...

Que había pasado?

La gripe encontró nuevos invitados: El miedo, la incredulidad, la ansiedad...  y como no, la faraona de la fiesta: La endometriosis. Todos juntos montaron una fiesta, ajenos al mal que causaba todo aquello.
Mientras, Sara buscaba refugio entre colchas, edredones y cojines,  deseando que el dolor le diera tregua para poder conciliar el sueño, lejos de su realidad mas inminente, lejos del estar despierto y tener que pensar.  
Pero con tanto Ruido, era imposible descansar...